Por mucho tiempo, la persona adulta mayor ha sido percibida como una carga económica y social, muchas veces inactiva o incapaz de participar en una iniciativa económica o productiva, esta imagen negativa ha formado parte de la percepción común en la sociedad. Dentro de este contexto, el Ministerio de la Mujer y Desarrollo Social (MIMDES) a través de la Dirección de la Persona Adulta Mayor, presentó el libro “Las personas adultas mayores y su contribución a la lucha contra la pobreza”, que muestra el real aporte de este importante segmento poblacional.
De acuerdo con los datos del Censo 2007, proporcionados por el INEI, la población adulta mayor del Perú asciende aproximadamente a 2 millones 495 mil 643 habitantes, lo que representa el 9,1% de la población total del país. La tendencia para los próximos años es la de un proceso de envejecimiento moderado acelerado. Desde este punto de vista, es importante promover una investigación social que contribuya a conocer la realidad de la población adulta mayor, y que desmitifique creencias y prejuicios interiorizados culturalmente, acerca de la pérdida de vigencia y su participación económica prologado por la Ministra Nidia Vilchez Yucra, fue presentado este libro que muestra las diversas formas en que los adultos mayores, contribuyen a dinamizar económicamente su entorno social y revelan el importante rol que juegan las personas adultas mayores en el desarrollo de mejores condiciones de vida en su entorno familiar; dejando atrás los estereotipos que les asignan un papel dependiente y de carga familiar.
Los importantes hallazgos de estas investigaciones indican que el aporte de la persona adulta mayor es diverso, y puede ser monetario o no monetario. En el caso de quienes reciben pensión, el monto aunque mínimo, cumple un importante papel en la dinamización de áreas claves de la economía familiar.
En el caso del apoyo no monetario, se da por ejemplo en el cuidado de nietos y nietas, relación afectiva muy nutritiva y positiva para las nuevas generaciones, que permite a las personas adultas de ese hogar, desarrollar actividades productivas; en otros casos, su permanencia en el hogar brinda un beneficio que redunda en la seguridad de la vivienda. Así ellos vienen cumpliendo un abanico de actividades en el hogar.
Es un pensamiento totalmente equivocado, el que el adulto mayor es una carga y un medio incapaz para la sociedad.
ResponderEliminarLos unicos males para la sociedad son los que hacen daño y atentan contra la economia-social, labroral y humana.